Por Marcelo Di Mitrio, Corredor Inmobiliario

La decisión de vender una casa vacía –o departamento, dúplex o PH– conlleva una tarea adicional. Y ella es la de hacer que luzca más interesante, cálida, invitante, hogareña.

Para lograrlo, te contamos aquí algunos trucos a fin de que ese inmueble aparentemente desolado no se vea así.

Algunos trucos

Vender una propiedad desocupada implica, para su propietaria o para su dueño, practicar algunas técnicas sencillas y efectivas. Ellas potencian sus atractivos, suman más interesados y, finalmente, reducen el tiempo necesario para concretar la operación.

Muebles de cartón

Cuando un inmueble está vacío, hay que ser muy cuidadoso porque la aparente amplitud que muestra suele desorientar a algunos interesados.

Suena paradójico, pero es así.

En general, a las personas les cuesta imaginarse cómo sería ese mismo lugar si tuviera los muebles correspondientes.

Por eso, una buena táctica es colocar muebles de cartón tal como se venden o “vestidos” con telas.

Estos muebles tienen un bajo costo. Se consiguen en sitios como Mercado Libre y en tiendas especializadas.

Pintura

En algunos inmuebles no habitados suelen verse en las paredes marcas de cuadros o de muebles.

Esas marcas no brindan una impresión positiva y si es lo primero que ve el interesado, inmediatamente pensará que habrá rastros de dejadez en otras habitaciones.

Siempre se dice que “No hay una segunda oportunidad para una primera buena impresión”.

Este tema de las marcas se soluciona aplicando una mano de pintura. No se trata de algo simplemente cosmético. Es una verdadera acción en favor de la mejora del inmueble.

Plantas

Las macetas con plantas dan idea de calidez, de familia, de amistad, de pureza, de aire sano.

Por eso, en una propiedad vacía el colocar algunas macetas es un detalle que nunca resulta menor.

Las plantas brindan alegría a su entorno y le dan un toque natural a cualquier ambiente.

Y ya que la propiedad está vacía, es aconsejable elegir aquellas plantas que demandan poco mantenimiento como el espatifilio, el cactus en todas sus variedades, el tronco de Brasil, el ficus, la monstera deliciosa o costilla de Adán, el potus, la areca, el senecio colgante, la echeveria y el aloe vera, entre otras especies de alta resistencia.

Cortinas

Las cortinas de tela de las ventanas le dan un toque particular a una casa vacía.

Nunca es lo mismo una ventana sin cortinas que otra con ellas.

Parece algo pequeño. Sin embargo, tiene una trascendencia notable en cuanto a la percepción.

Algo adicional: es mejor que las cortinas sean de telas traslúcidas y claras, dejan entrar la luz y brindan una sensación de amplitud.

Placas antihumedad

Las manchas de humedad suelen ser un problema que a veces pareciera no tener solución.

En algunos casos específicos, eso se resuelve colocando placas antihumedad.

Se trata de placas compuestas por diversos materiales, como yeso y fibra entre ellos.

Las placas son porosas. Su función es la de absorber la humedad y hacer que se evapore, evitando así que se estropeen las parees y los techos.

Muchas personas han optado por esta solución tan sencilla como económica.

Hay diversos estilos de placas que se adaptan a las distintas construcciones. Resultan decorativas y armoniosas, pero sin llamar demasiado a la atención.

Vender una casa: un tema emocional

Vender una casa tiene mucho de emocional.

Hay que cautivar a la potencial compradora y al futuro adquirente por medio de sensaciones positivas, placenteras.

Ambos deben sentir que ese inmueble es “su lugar”, y no solo cuatro paredes con un techo y un piso.

Alguien dijo una vez: “El gran destino de cualquier empresa, marca o persona es ser capaces de conquistar las emociones del cliente”.

Y ese concepto es trasladable, en un cien por cien, a la venta de una propiedad.

En Di Mitrio Inmobiliaria tenemos continuamente en nuestra mira ese objetivo, y por eso aportamos a quien decide vender su propiedad diversas ideas.

El fin último es que la operación se concrete en un tiempo prudencial, acotado. Así, la persona que vende puede pasar a su proyecto central: vivir en una propiedad que se adapta justo a lo que necesita en esta etapa de su vida y la de quienes lo rodean.